
Os escribo desde el corazón de África!!!!! 

Estamos muy bien, como os dijo Isidro en el otro correo. Tenemos una Comunidad muy bonita, unida, equilibrada porque somos cuatro tipos diferentes pero compenetrados. Todas tenemos nuestro espacio aquí, todas nos sentimos “útiles” y aceptadas de una manera diferente y eso hace que nadie se sienta fuera de lugar. Os mando una foto de la capilla de nuestra casa, pequeñita y acogedora (con el pequeño Moses echándose una siesta), y con “vuestro” Comboni.Lugar importante “de encuentro” de nuestra comunidad…..
El Orfanato es una realidad difícil, un proyecto precioso, pero al mismo tiempo muy exigente, porque vivimos dentro del recinto y porque estamos metidas hasta las orejas desde el minuto uno. Además el trato constante con los niños hace que tengamos que estar “a tope” con más motivo (no se cansan nuncaaaa
!!!)

Personalmente creo que empiezo a despertarme después de casi tres meses y las imágenes de mi cabeza (las buenas y las malas) comienzan a hacer mella en mi corazón. Me cuesta un poco ver cómo crecen los niños sin las atenciones a las que estamos acostumbrados, y me cuesta bastante asimilar el cómo están los discapacitados. Pero también me gusta estar aquí con esta realidad, porque necesito poner en manos de Dios muchas cosas que no comprendo. Y el tener a Dios tan presente me hace sentir bien, y me hace ser consciente de que esto no es “mío”.
En fin, que estoy bien, asimilando y disfrutando de una vida diferente y preciosa.
Los que me han atrapado muchísimo (y jamás lo hubiera imaginado) son los niños con discapacidades serias……ahhhh!!!!! Son alucinantes!!! Especiales, angélicos…….. estamos todas locas con ellos, porque no paran de sonreír, no piden nada, no esperan nada y sin embargo siempre nos reciben con una sonrisa enorme, son preciosos. Un descubrimiento tremendo……
Con la familia comboniana “super bien” (sabéis que soy optimista por naturaleza, pero no exagero es la verdad nos tratan muy bien), nos tienen muy mimadas, nos sentimos bien recibidas en todas las casas, con confianza y con alegría. El P. Ramón es el que nos acompaña y es genial. Participamos con ellos en 2 grupos vocacionales, o de lectura de la Biblia, uno los jueves con una comboni sister y otro algún domingo con un father.
Con los laicos ugandeses, despacico pero con buena letra!!! trabajando…….
Yo he acompañado tb a Sister Teresa un par de domingos a una de las capillas más alejadas para celebrar con una comunidad la Liturgia de la Palabra.
En todos sitios nos sentimos bien, la gente es muy abierta y muy acogedora.
Os contaría muchísimas más cosas…..pero me cuesta decir todo lo que tengo en la cabeza y en el corazón, es MUCHO y variado ; )
Lo más importante es que estoy bien, (cogidica de la mano del Señor) y os tengo a todos conmigo.
Besos.
Carmen Aranda LMC