En este día en el que celebramos el Bautismo del Señor, el Papa nos invita a todos los cristianos a «hacer de nuestra vida un testimonio alegre que ilumina el camino y lleva esperanza y amor», siguiendo el «estilo de Jesús», que pasa «por el camino de la obediencia y de la solidaridad con el hombre frágil y pecador, el camino de la humildad y de la plena cercanía de Dios a sus hijos».
«El estilo del siervo humilde y dócil, y éste debe ser el estilo misionero de los discípulos de Cristo: anunciar el Evangelio sin gritar, con humildad, amabilidad y firmeza, sin arrogancia o imposición«
Porque, «la verdadera misión no es jamás proselitismo sino atracción a Cristo, a partir de la fuerte unión con Él en la oración, en la adoración y en la caridad concreta, que es servicio a Jesús presente en el más pequeño de los hermanos».
«Estamos llamados a hacer de nuestra vida un testimonio alegre, que ilumine el camino que lleva esperanza y amor.»