Un modelo valiente para nosotros, sin temor a adentrarse en terrenos donde me puedo sentir ajeno. Y sin duda el mensaje que difunde Francisco en esta charla es puntero e innovador, porque está por hacer: Todo está conectado, un hombre con esperanza significa que no es noche del todo, el único futuro que merece la pena construir es uno en el que quepamos todos, pensar en «nosotros» significa adentrarse en la revolución de la ternura… El Espíritu nos habla a través de este pastor y nosotros, misioneros, le escuchamos.