El día 22 de enero, los laicos combonianos, y socios de Amani, hemos tenido ocasión de compartir y ver lo “caminado” en todo un año de trabajo y puesta en común de esfuerzos e ilusiones, para seguir siendo puente entre las personas.
El formato, el que “toca”: online… Pero no importa, este es el tiempo que nos toca vivir y lo hacemos con esperanza en nuestro seguimiento de Jesús. Bonito ver que siempre parece que es poco lo que se hace y sin embargo seguimos “estando”, seguimos enviando, y seguimos construyendo con las manos y fuerzas de los que están allí y las ganas y entusiasmo de los que estamos aquí.

Cuentas claras y números que vuelan a Mozambique, Etiopía, Brasil y República Centroafricana. Dinero que se transforma, con amor y esperanza, en becas de estudio, en comida y asistencia sanitaria de emergencias en un país en guerra, en proyectos de energía y conexión en las zonas más olvidadas del planeta, en acompañar, asistir y escolarizar a niños de la calle, en reconstruir un vallado o iluminar zonas oscuras de una misión.
Estamos gracias a vosotros, y queremos seguir trabajando de la mano de todos los que soñáis con mundos sin “tantos escalones” y con más “llanuras” donde se pueda construir y caminar en igualdad.
Os invitamos a visitar la página web de Amani, y conocernos, a ver las memorias que hemos colgado en la página web y descubrir que el 98% del dinero que ingresamos es para proyectos. Os animamos a preguntar, a haceros socios, a buscar con nosotros formas nuevas para mejorar la vida de nuestros hermanos del sur.
Os queremos con nosotros en el apasionante camino que inició Jesús de Nazaret y que no queremos dejar de recorrer en lucha por la justicia y siempre al servicio de los últimos.
Amani. Laicos Combonianos